Pues sí, queridos Guinnessianos, el cartel anunciador de que el aforo estaba completo lucía en la puerta de la Sala Malandar gracias a la masiva respuesta del público sevillano al concierto que supuso la vuelta a casa después de un periodo de tiempo más largo de lo deseado. Aquellos que no conocían a Amigos de Guinness miraban con cierta extrañeza a esos otros que antes del concierto ya daban botes: cuando la música comenzó a fluir, un estallido de ritmo, armonía y melodía conquistó de forma fulminante los cuerpos, que no tuvieron más remedio que dejarse llevar al compás frenético de cada uno de los instrumentos, entonces comprendieron el por qué. Y es que la alegría y el dinamismo de la música irlandesa unidos al carácter vivo y candente del grupo por su condición andaluza se convierten en todo un cóctel molotov: “un grupo netamente andaluz pero con un inconfundible y auténtico sonido irlandés” (El Correo de Andalucía).
Agradecemos y nos sentimos muy satisfechos de la gran respuesta de nuestro público, aunque lamentamos el que hubiera gente que se quedó en la calle al agotarse las entradas. Pero a unos y a otros os diremos que no os preocupéis, que pronto volveremos.
HASTA PRONTO.
…Héctor, Ray, Juan Carlos, Eduardo, Eliseo, José Luis y Jesús.
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